Nuevos hábitos para el nuevo año.

Comenzar un nuevo año suele traer consigo miles de propuestas de mejora, planes y objetivos que pasados los primeros días, vuelven al cajón del olvido. Detectamos aquello que nos ha afectado negativamente el año anterior y queremos que desaparezca de la noche a la mañana…

«Voy a pasar más tiempo de calidad», «voy a dedicarme  mí mismo» «ahora sí voy a cuidarme» son de las frases que más se repiten estos días , pero ¿por qué?

El día a día es una sucesión de actividades que vamos desarrollando frenéticamente sin pararnos a pensar en por qué hacemos lo que hacemos. Y no es hasta el momento en el que algo malo pasa, cuando nos damos cuenta de que es necesario parar un poco, bajar el ritmo y disfrutar de las vistas.

Sensación de nerviosismo, irritación, angustia… son alteraciones que podemos llegar a experimentar y  que originan trastornos más graves, tanto físicos como psicológicos.

¿Cómo ponerle remedio?

Nunca podrás cambiar tu vida hasta que no cambies aquello que haces diariamente.

El secreto de tu éxito se basa en tu rutina diaria.

John C. Maxwell

Introducir nuevos hábitos  en nuestra rutina es el primer paso para conseguirlo.

“Se denomina hábito a toda conducta que se repite en el tiempo de modo sistemático”

Te planteamos una serie de hábitos saludables para empezar:

1. Identifica qué quieres cambiar. Aléjate de situaciones tóxicas y plantéate cambiar aquello que no te guste de tu día a día. Empieza por cosas pequeñas: Prueba a sonreír a aquel que no te sonríe, agradece lo que recibes cada día, muéstrate compasivo, presta tu ayuda cuando alguien lo necesite….
2. Establece un objetivo y haz un compromiso contigo mismo. El hecho de verlo como una promesa, hará que te esfuerces más para conseguirlo. “El compromiso lleva a la acción, la acción te acerca a tus sueños”

3. Armoniza tu organismo, tus emociones y tu mente. Es fundamental conseguir equilibrar nuestra mente para que nuestro cuerpo funcione con armonía. Para ello no dudes en recurrir a profesionales que sepan guiarte en este proceso.

Prueba una sesión de Chi Kung* (es un arte milenario cuyo objetivo es regular los desequilibrios emocionales que le ocasionan a nuestro organismo trastornos físicos o energéticos) Mediante la combinación de ejercicios estáticos en coordinación con el control de la respiración consigue conectar cuerpo y mente y ayudarnos a solventar estas alteraciones.

4. Sal de tu zona de confort, atrévete a probar eso que tienes en mente, arriésgate, tu construyes tu camino.
5. Disfruta de la naturaleza y aprovecha lo que tiene para darte. Confía en que
6. Trabaja los nuevos hábitos paso a paso, deja constancia de tus avances (¡incluso cuando falles!) Nadie dijo que fuera fácil y esta es la única forma de ser constantes.

¿Te animas a ponerlos en práctica? Cuéntanoslo en comentarios!